El postre del grito: la receta más fácil para una gelatina de mosaico tricolor que enamorará a tu familia
En la mesa de la Noche Mexicana, el pozole es el rey y los antojitos son los príncipes, pero toda buena fiesta necesita un postre que cierre con broche de oro. Y no hay nada más vistoso, delicioso y familiar que una gelatina de mosaico.
Este año, te enseñamos a preparar la versión patriótica: una gelatina de mosaico tricolor que no solo se verá espectacular en tu mesa, sino que con su sabor cremoso y refrescante, será el final perfecto para la cena del Grito. ¡Es mucho más fácil de hacer de lo que crees y a los niños les encanta!

Ingredientes: lo que necesitas para tu bandera comestible
Para los cubitos de colores (el mosaico):
- 1 sobre de gelatina sabor limón (para el verde)
- 1 sobre de gelatina sabor fresa o grosella (para el rojo)
- 2 litros de agua
Para la gelatina de leche (el blanco cremoso):
- 1 lata de leche evaporada
- 1 lata de leche condensada
- 1 lata de media crema
- 1 taza de leche entera
- 4 sobres de grenetina (gelatina sin sabor), que son 28 gramos en total
- 1/2 taza de agua fría
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
Utensilios:
- Dos moldes rectangulares o refractarios para las gelatinas de colores.
- Un molde grande para la gelatina final (de rosca, rectangular, el que más te guste).
- Un poquito de aceite de cocina para engrasar los moldes.
Paso a Paso: ¡A Preparar la Magia!
Parte 1: Los Cubitos de Colores (Hazlos un día antes o por la mañana)
- Prepara la Gelatina Verde: En un recipiente, disuelve el sobre de gelatina de limón en 2 tazas de agua hirviendo. Mezcla muy bien hasta que no queden grumos. Luego, agrega 2 tazas de agua fría y revuelve.
- Vierte y Refrigera: Engrasa ligeramente uno de tus moldes rectangulares con una servilleta con aceite. Vierte la gelatina de limón y métela al refrigerador por lo menos 4 horas, o hasta que esté completamente firme.
- Prepara la Gelatina Roja: Repite exactamente los mismos pasos con la gelatina de fresa o grosella y el otro molde.
- Corta los Cubitos: Una vez que ambas gelatinas estén bien cuajadas, sácalas del refrigerador. Con un cuchillo, córtalas en cubos de tamaño mediano. ¡Ya tienes tu mosaico!

Parte 2: La Gelatina de Leche (El Secreto Cremoso)
- Hidrata la Grenetina: En la media taza de agua fría, espolvorea los 4 sobres de grenetina en forma de lluvia. Deja que repose por unos 10 minutos. Verás que se forma una especie de esponja.
- Disuelve la Grenetina: Mete la grenetina hidratada al microondas por unos 20-30 segundos, o caliéntala a baño maría, hasta que se vuelva líquida por completo. ¡Cuidado de que no hierva!
- Licúa las Leches: En la licuadora, vierte la leche evaporada, la leche condensada, la media crema, la taza de leche entera y la vainilla. Licúa por un minuto.
- Integra la Grenetina: Con la licuadora encendida a baja velocidad, agrega la grenetina líquida en forma de hilo. Licúa por un minuto más para que todo se integre perfectamente.

Parte 3: ¡Arma tu Mosaico!
- Engrasa tu Molde Final: Pasa una servilleta con un poquito de aceite por todo el interior de tu molde grande. Esto es clave para que se desmolde sin problemas.
- Mezcla los Colores: En un tazón grande, mezcla con cuidado los cubitos de gelatina verde y roja.
- Combina Todo: Coloca los cubitos de colores dentro de tu molde grande, distribuyéndolos bien. Luego, vierte con cuidado la mezcla de leches hasta cubrir todos los cubos.
- El Último Paso: ¡Al Refri! Mete tu gelatina al refrigerador por lo menos 6 horas, aunque lo ideal es dejarla toda la noche para que cuaje a la perfección.
- Desmolda y Disfruta: Para desmoldar, despega con cuidado las orillas con tus dedos húmedos y voltea sobre un platón. ¡Listo! Ya tienes el postre más mexicano y delicioso para tu fiesta.