Victoria Valadez: La Historia de Lucha de la Madre que Inspiró “Amor Eterno” de Juan Gabriel
Detrás de la icónica canción “Amor Eterno”, interpretada con un sentimiento que ha conmovido a generaciones, se encuentra la historia de una mujer cuya vida estuvo marcada por la tragedia, la resiliencia y un amor incondicional: Victoria Valadez Rojas, la madre de Alberto Aguilera Valadez, a quien el mundo conocería como Juan Gabriel. Su biografía no solo es la inspiración del himno a la ausencia materna, sino también la base sobre la que se forjó el carácter del “Divo de Juárez”.

La vida de Victoria es una pieza fundamental para entender la nostalgia y la profundidad en las composiciones del artista, reflejando las vivencias de muchas mujeres de su época.
Una Tragedia Familiar en Michoacán
Originaria de Parácuaro, Michoacán, Victoria Valadez formó una familia junto a su esposo, Gabriel Aguilera Rodríguez. Juntos tuvieron diez hijos, siendo Alberto el menor de ellos. Sin embargo, la estabilidad de su hogar se fracturó a raíz de un desafortunado accidente. Gabriel, en su trabajo como campesino, provocó un incendio de pastizales que se salió de control.

El estrés y la culpa derivados de este suceso afectaron gravemente su salud mental. Reportes biográficos señalan que fue diagnosticado con esquizofrenia y posteriormente internado en el hospital psiquiátrico de La Castañeda, en la Ciudad de México. La familia nunca más volvió a tener noticias de él, dejando a Victoria sola a cargo de sus hijos en una situación de extrema vulnerabilidad.
El Difícil Camino a Ciudad Juárez y una Decisión Dolorosa
Ante la adversidad y la falta de oportunidades, Victoria Valadez tomó la decisión de dejar su lugar de origen y migrar con sus hijos a Ciudad Juárez, Chihuahua, en busca de trabajo para poder mantenerlos. En la ciudad fronteriza, encontró empleo como trabajadora doméstica, pero sus ingresos eran insuficientes para cuidar de toda su familia.

Esta precaria situación la orilló a tomar la que, según el propio Juan Gabriel, fue la decisión más dolorosa de su vida: internar a su hijo más pequeño, Alberto, en la Escuela de Mejoramiento Social para Menores, conocida como “El Tribunal”. Con tan solo cinco años, el futuro “Divo de Juárez” ingresó a esta institución, donde pasó gran parte de su infancia y adolescencia. Este evento marcó profundamente al artista, y el sentimiento de abandono y la añoranza por su madre se convertirían en temas recurrentes en su música.
El Reencuentro y la Inspiración de “Amor Eterno”
A los 13 años, Alberto Aguilera escapó del internado y buscó a su madre, logrando el tan anhelado reencuentro. A partir de entonces, comenzó a forjar su camino en la música, siempre con la figura de su madre como su principal motor y, en ocasiones, su más dura crítica.
El capítulo más definitivo de su relación llegó en 1974. Mientras Juan Gabriel se encontraba en el inicio de una exitosa gira en Acapulco, Guerrero, recibió la noticia del fallecimiento de su madre. El impacto de la pérdida, sumado a la distancia, fue devastador. De ese profundo dolor nació “Amor Eterno”, una canción que compuso para ella y que se transformó en un himno universal para todos aquellos que han perdido a su madre. La letra, que menciona su tristeza y cómo prefiere imaginársela “contemplando las estrellas”, es un reflejo directo de ese momento.
El Legado de Victoria en la Música de Juan Gabriel
La vida de Victoria Valadez Rojas no fue sencilla. Enfrentó la pérdida, la pobreza y la soledad, pero su fortaleza fue la herencia que dejó en su hijo. Juan Gabriel no solo la inmortalizó en “Amor Eterno”, sino que su influencia se percibe en muchas otras de sus letras que hablan de amor filial, de superación y de las raíces humildes. La historia de Victoria es la de una madre que, con sus decisiones, forjó indirectamente el destino de uno de los más grandes ídolos de la música mexicana.







