El SIDA en la salsa: Las voces que la enfermedad silenció
La salsa, un género musical que es sinónimo de vida, baile y alegría, también tiene una historia marcada por la tragedia. Durante las décadas de los 80 y 90, en el apogeo de su popularidad mundial, una epidemia silenciosa comenzó a cobrar la vida de algunos de sus más grandes talentos. El SIDA (Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida) no distinguió escenarios ni fama, y dejó un vacío irremplazable en el corazón de los amantes de la música latina.
La desinformación y el estigma que rodearon al VIH (Virus de Inmunodeficiencia Humana) en esos años hicieron que la enfermedad fuera un tema tabú. Sin embargo, con el tiempo, se ha podido documentar cómo este padecimiento afectó a la comunidad de la salsa, llevándose a artistas que estaban en la cima de sus carreras y dejando un legado musical que perdura hasta hoy. Estas son las historias de algunos de los salseros cuyas voces fueron silenciadas por complicaciones derivadas del SIDA.
Héctor Lavoe: La voz que se apagó demasiado pronto
Considerado por muchos como “El Cantante de los Cantantes”, Héctor Lavoe es una de las figuras más emblemáticas de la salsa. Nacido como Héctor Juan Pérez Martínez en Ponce, Puerto Rico, su carrera despegó en Nueva York junto al trombonista Willie Colón, creando una de las duplas más exitosas en la historia del género. Temas como “El Cantante”, “Periódico de Ayer” y “Mi Gente” se convirtieron en himnos para millones de latinos en todo el mundo.
La vida de Lavoe estuvo marcada por el éxito arrollador en los escenarios, pero también por profundas tragedias personales y una intensa lucha contra la adicción a las drogas. A finales de la década de los 80, fue diagnosticado con VIH. La enfermedad agravó su ya deteriorado estado de salud y emocional. Héctor Lavoe falleció el 29 de junio de 1993 en un hospital de Nueva York, a los 46 años, debido a un paro cardiorrespiratorio como complicación del SIDA. Su muerte conmocionó al mundo de la música y dejó un legado imborrable.
Frankie Ruiz: La controversia sobre su partida
Conocido como “El Papá de la Salsa”, Frankie Ruiz fue una de las voces más importantes de la salsa romántica en los años 80. Nacido en Paterson, Nueva Jersey, de padres puertorriqueños, Ruiz se destacó por su estilo único y su carisma en el escenario. Éxitos como “Desnúdate Mujer”, “Tú con él” y “La Rueda” lo catapultaron a la fama internacional.
Al igual que Lavoe, la vida de Frankie Ruiz estuvo llena de altibajos, incluyendo problemas con las drogas y el alcohol. Su muerte, ocurrida el 9 de agosto de 1998 a los 40 años, ha estado rodeada de información contradictoria. La causa oficial de su fallecimiento fue cirrosis hepática. Sin embargo, diversas fuentes y biografías han señalado que el cantante también padecía de VIH/SIDA, lo que habría contribuido al rápido deterioro de su salud. Aunque la causa directa fue la falla hepática, la mención recurrente del SIDA en su historia refleja la dura realidad que enfrentaron muchos artistas de su generación.
Otras voces y talentos que se apagaron
El impacto del SIDA en la comunidad salsera no se limitó a sus figuras más conocidas. Otros músicos, coristas y compositores talentosos también perdieron la vida a causa de esta enfermedad, dejando un hueco en las orquestas y en el corazón del género.
- Larry Spencer: Trompetista estadounidense, fue una figura clave en la escena de la salsa de Nueva York. Colaboró con grandes orquestas como las de Larry Harlow y formó parte de la legendaria Fania All-Stars. Falleció a finales de los 80 por complicaciones del VIH.
- Hiram Velásquez ‘Lupo El Fantástico’: Cantante puertorriqueño que tuvo un ascenso rápido en Nueva York con el apoyo de Tito Puente. Su carrera se vio afectada por el abuso de sustancias, que lo llevó a contraer VIH y fallecer en 1988.
- Titti Sotto: Nacido en Cuba, fue un destacado cantante y compositor cuyas canciones fueron grabadas por grandes de la música como Celia Cruz. Falleció en Puerto Rico en 1992 a causa del SIDA.
- Willie ‘El Ruso’ de Rosario: Fue un talentoso timbalero que formó parte de la orquesta de Willie Colón durante una de sus épocas más exitosas. Su percusión fue parte fundamental del sonido de la banda. Falleció en el año 1992.
- Frankie Rodríguez: Reconocido cantante y corista, fue una pieza importante en la orquesta de otro grande de la salsa, Marvin Santiago. Su voz acompañó muchos de los éxitos del “Sonero del Pueblo”. Falleció en 1989.
Un llamado a la conciencia sobre el VIH/SIDA
Las historias de estos artistas son un recordatorio del devastador impacto que tuvo la epidemia del SIDA, especialmente en una época con menos información y sin los tratamientos efectivos que existen hoy. Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y ONUSIDA, el VIH sigue siendo un grave problema de salud pública mundial.
Hoy, gracias a los avances médicos, la infección por VIH se ha convertido en una condición crónica manejable. Las personas con acceso a tratamiento antirretrovírico pueden llevar una vida larga y saludable, y alcanzar una carga viral indetectable, lo que significa que no pueden transmitir el virus. La prevención, la detección temprana a través de pruebas y el combate al estigma son fundamentales para poner fin a la epidemia. Recordar a las voces que se apagaron es también una forma de reforzar la importancia de cuidarnos y de informarnos para proteger nuestra salud.
