El Salón de la Fama de las Excusas: El Top 10 que todas hemos usado alguna vez
Seamos honestas, comadre. Todas hemos estado ahí: suena el teléfono, es esa invitación a la que no quieres ir, o te das cuenta de que vas tardísimo a ese compromiso. En ese momento, nuestro cerebro se ilumina y, como por arte de magia, nace una obra de arte de la creatividad mexicana: la excusa perfecta.

Poner pretextos es un arte que hemos perfeccionado de generación en generación. Es nuestra arma secreta para navegar la vida social sin herir sentimientos (o al menos, intentándolo). Por eso, en Sabrosita Digital, hemos decidido rendirle un homenaje a esas frases célebres que nos han salvado el pellejo más de una vez. ¡Este es el Top 10 de las excusas más famosas!
10. “Te juro que mañana sin falta”
La frase oficial de la procrastinación. Se usa para pagar una deuda, para devolver el tupper que te prestaron hace seis meses o para empezar la dieta. Es una promesa llena de buenas intenciones que vive en un futuro que, curiosamente, nunca llega.
9. “No tengo señal / Se me está cortando”
La bendita tecnología siempre nos puede fallar… convenientemente. Esta es la excusa perfecta para terminar una llamada incómoda con el del banco, con la tía preguntona o cuando simplemente ya no quieres seguir hablando. Lo mejor es que puedes colgar sin verte grosera.

8. “Es que mi hijo…”
El as bajo la manga de todas las mamás. Esta frase es un comodín que justifica cualquier cosa: llegar tarde (“es que mi hijo no se quería vestir”), irse temprano (“es que mi hijo tiene tarea”) o no ir (“es que mi hijo se siente mal”). Nadie se atreve a cuestionar el sagrado deber de una madre.
7. “Se me olvidó por completo”
Esta es la excusa “honesta”. A veces, es verdad. Pero la mayoría de las veces es la forma más elegante de decir: “No era mi prioridad y mi cerebro decidió borrarlo”. Funciona perfecto para cumpleaños de compañeros de trabajo o para esa tarea que te encargó tu pareja.

6. “Le pregunto a mi esposo y te aviso”
La técnica de delegación de responsabilidad. Es la salida de emergencia perfecta cuando no quieres dar un “no” directo. Le echas la bolita a tu pareja y, si al final no se hace, la culpa es compartida. ¡Una jugada maestra!
5. “No tengo dinero / No me han pagado”
La excusa universal para evitar cualquier plan que implique gastar. Funciona para la salida al cine, la cena con las amigas o la cooperación para el regalo de alguien. Es infalible, porque nadie se atreve a revisar tu cartera para comprobarlo.

4. “Me siento un poco mal / Me duele la panza”
El clásico de clásicos para cancelar un plan a última hora. Un dolor de panza o de cabeza es el pretexto perfecto porque no se puede ver, no se puede medir y genera compasión inmediata. Nadie te va a decir: “A ver, demuéstrame tu dolor de estómago”.
3. “No me llegó tu mensaje”
Otra joya donde culpamos a la tecnología. El WhatsApp falló, el internet se fue, el celular se trabó… las posibilidades son infinitas. Es la forma moderna de decir “me hice la que no vi” y salirte con la tuya.

2. “Hay muchísimo tráfico”
En ciudades como la nuestra, esta no es tanto una excusa como una probabilidad muy alta. Es el pretexto perfecto para justificar cualquier retraso, desde 15 minutos hasta una hora. Lo mejor es que casi siempre es creíble y hasta genera solidaridad: “Sí, comadre, está horrible el tráfico, no te preocupes”.
1. “Ya voy en camino / Ya voy llegando”
Y en el número uno, la reina, la patrona, la campeona indiscutible de las excusas. Esta frase es una obra de arte de la relatividad del tiempo y el espacio. “Ya voy llegando” puede significar que estás a dos cuadras, que apenas te estás subiendo al microbús o, en los casos más extremos, que todavía te estás bañando. Es la mentira piadosa que nos une a todos como mexicanos.