¡No creerás lo que estas personas han ingerido para dar un espectáculo!
Ingerir comida en grandes cantidades ya es toda una hazaña, pero devorar objetos incomestibles está a otro nivel. Aunque suene imposible, hay personas que padecen ciertos trastornos que les permiten hacer cosas que para nosotros serían impensables (¡y letales!).
Abel Azcona
El artista español Abel Azcona rompió las barreras del arte contemporáneo con su performance “La Ingesta”. Azcona dedicó varios días a comerse unos ejemplares de la Biblia, la Torá y el Corán durante nueve horas. Sobra decir que varias organizaciones religiosas se lo tomaron de todo menos bien. Eso sí, ¡Azcona comió muchísimo papel!
Leon Samson
El culturista de origen griego Leon Samson fue toda una celebridad en Australia. Se dice que llegó a ingerir unas 22.000 cuchillas de afeitar a lo largo de 10 años.
Tarrare
Al artista y soldado del siglo XVIII conocido como Tarrare se lo recuerda por haber comido objetos de lo más extraños. Entre ellos, corchos de vino. Pero puede que lo más raro que hiciese fuese devorar animales vivos. ¡Se dice que Tarrare llegó a comer anguilas y serpientes vivas sin tan siquiera masticar!
Charles Domery
El soldado polaco del siglo XVIII Charles Domery es el siguiente de la lista. Al igual que Tarrare, Domery tenía un apetito insaciable. Se dice que una vez llegó a comer 1,8 kg de ubres de vaca crudas.
¡Por si esto fuera poco, Domery le sumó otros 2,2 kg de carne cruda al menú! Y como es normal quedarse con hambre después de comerse prácticamente una vaca entera, Domery se tomó 12 velas de sebo de postre. ¡Seguro que su abuela estaría orgullosa!
Hadji Ali
Hadji Ali fue un artista egipcio conocido por sus espectáculos de regurgitación controlada. Ali trabajaba tanto con líquidos como sólidos (¡se dice que una vez regurgitó 40 nueces!). Su habilidad más conocida, sin embargo, puede que fuese la de expulsar un chorro de agua de forma ininterrumpida. Pero Ali no solo regurgitaba agua y nueces, ¡sino que también comía joyas, monedas, queroseno y peces vivos!
Todd Robbins
El mago estadounidense es famoso por sus espectáculos, en los que ha llegado a tragarse espadas. Pero a Robbins no solo le va el metal, sino también el cristal. Concretamente, las bombillas. ¡Una vez llegó a comerse 4000!
Branko Crnogorac
Si crees que 4000 bombillas ya son muchas, tenemos algo que contarte: ¡el doble de riesgo Branko Crnogorac batió el récord de Robbins tras comerse 25.000! Pero la cosa no acaba ahí: se dice que Crnogorac también se comió unos 12.000 tenedores y 2000 cucharas. Ah, ¡y 2600 platos!
Michel Lotito
Al artista francés Michel Lotito también se lo recuerda como Monsieur Mangetout (“señor comelotodo”) por una buena razón. Tenía un apetito insaciable por los objetos de cristal y metal. Lotito llegó a aparecer en Libro Guinness de los récords por su extraña dieta. Según consta, se comió “18 bicicletas, 15 carritos de supermercado, 7 televisiones, 6 candelabros de techo, 2 camas y un par de esquís”. ¡Michel Lotito se comió una avioneta Cessna 150! ¿Llegará alguien a superar su récord?